Para los argentinos, los personajes más destacados del Bicentenario están muertos y son varones. La memoria colectiva parece haber excluido a las mujeres.
Susana Micone smicone@argentina.com
El pasado 25 de mayo fue publicada una interesante encuesta diseñada por la consultora D’Alessio IROL para Clarin.com, sobre los argentinos más destacados del Bicentenario, realizada sobre una muestra de treinta mil personas de todo el país. El sondeo pone de manifiesto presencias, ausencias y valoración de personajes públicos de interés nacional. Las principales menciones, separadas por rubros, correspondieron a:
CULTURA, ARTE Y LITERATURA
Jorge Luis Borges 54%, Ernesto Sábato 7%, Julio Cortázar 6%
PRÓCERES DE LA REVOLUCIÓN DE MAYO
Mariano Moreno 48%, Manuel Belgrano 20%, Cornelio Saavedra 11%
DEPORTES
Diego Maradona 46%, Juan M. Fangio 30%, Guillermo Vilas 5%
CIENCIA
René Favaloro 34%, Luis Federico Leloir 17%, Bernardo Houssay 13%
POLÍTICA
Juan Domingo Perón 30%, Raúl Alfonsín 2% Hipólito Yrigoyen 10%
ESPECTÁCULOS
Carlos Gardel 9,9%, Alberto Olmedo 9,7%, Luis Sandrini 5%
A partir de estos resultados podemos deducir que:
* La mayoría de los argentinos destacados están muertos, excepto dos deportistas (Diego A. Maradona y Guillermo Vilas) y el escritor Ernesto Sábato.
* Los preferidos provienen de la Literatura, la Revolución de Mayo y el fútbol (en ese orden) y tienen en común haber sido muy queridos.
* Ninguna mujer aparece encabezando alguna de las 6 categorías. La más destacadas fueron Eva Perón ( 5º puesto en Política), Gabriela Sabatini ( 6ª en Deportes) y Mirtha Legrand (7º en Espectáculos)
Resulta casi obligado preguntarse por la falta de presencia de personalidades femeninas en la memoria colectiva. Aún suponiendo que determinados rubros no han sido transitados por demasiadas mujeres –como la Revolución de Mayo o el deporte- cabría preguntarse por qué no aparecen más mujeres relacionadas con el mundo del espectáculo.
¿No existieron personalidades femeninas relevantes en nuestros doscientos años de historia como Nación? ¿Se trata de un olvido involuntario o de que simplemente jamás se escribió la historia de ellas?
Con la presencia de una mujer en la Presidencia de la República, paradójicamente los logros femeninos suelen ocupar poco espacio en los medios y reciben menos reconocimiento institucional en el país.
En un intento de revertir esta situación, la Asociación de Mujeres de Negocios y Profesionales del Sur (AMNYP del Sur), institución que pertenece a BPW (Business and Professional Women) Argentina y a través de esta última a BPW International, decidió homenajear a mujeres destacadas por su labor profesional, empresarial y social en el Conurbano Sur.
Así nació el Premio Palas Atenea, entregado por primera en 2007 en el marco de la Ceremonia de las Candelas, que simboliza la unión de las mujeres de BPW en la lucha por la equidad de género y el mejoramiento de la condición femenina.
Por su parte, la Comisión de Igualdad Real de Trato y Oportunidades de la Honorable Cámara de Senadores de la Provincia de Buenos Aires premia cada año a mujeres que acreditan experiencias de manifiesto interés social. Los distritos de la provincia, a través de instituciones intermedias, elevan al Senado Provincial el currículum de las postulantes que se consideran merecedoras de la mención. Para el 2009, AMNYP del Sur -con el aval de la Senadora Viviana Arcidiácono- propuso a las mujeres que habían distinguido con el Premio “Palas Atenea”.
Estas ciudadanas excepcionales recibieron el Premio Provincial Mujer Innovadora 2009. Fueron galardonadas : Nilda Toledo Guma (Artes Plásticas), Mariela Antoniska (Deportes), Miryam Kurganoff (Ciencia), Silvia Casas (Defensa de la Niñez), María Emma Zapata (Promoción y Organización Barrial), Belkys Magalí Karlen (Acción Política), Raquel Rossetti (Danzas). Otras dos mujeres de la zona sur del conurbano bonaerense -propuestas por otras instituciones locales- fueron premiadas en la misma ocasión. Se trata de Alcira Doro Madoni (Promoción de la lectura entre los jóvenes) y de Marta Santos (Periodismo).
Con el Bicentenario, la Argentina tiene la oportunidad de incorporar a sus mujeres a la historia, para escribir un nuevo capítulo en el que no se admita la discriminación de género.
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